2.4.08


Ojos de mar.

Destrabar los ojos
después que hayas roto
la ultima certeza
de que no podré volver
y que vos nunca te iras
de atrás de esa maleza maleva
de sustos y desencuentros
a la que no nos
acostumbraremos nunca,
será por eso
que me rechinan los dientes
antes de besarte
el cuello terso y fragil
como porcelana china,
que tal vez lo rojo
que transpiran mis manos
cuando no están
tus muslos y tu cadera
bella como alpaca inconseguible,
sea sangre desesperada
buscando el terciopelo
de tu piel,
donde escribir que jamas
estaré tan lejos,
como estoy de muerto y de loco
paseando tu ausencia
de la mano!

2 comentarios:

-> dijo...

me quise hacer la rebelde y leí todo. me encantó. gracias a vos...

algonomade dijo...

hay rebeldias que suman lugares donde reposar, de lo cotidiano del mundo.gracias por dejar tu rastro paula.