27.7.08

Algunos domingos son como...


Patos cazadores.

La similitud de peligro
en lo hipnótico
de un río manso,
una pequeña tregua
que no aconseja
relajarse demasiado...
repone cabezas,
desajusta idem´s
porquerías y aplausos que caminan
saludando espontáneos,
si salgo y tiro servilletas,
aun así caminando felino, audaz,
desconcierto algunas baldosas
pero no los pies,
los ojos restallando
como vidrieras,
iras y desenfrenos compartidos, rotos...
solo si no te has salvado
de una suma de omnipotencia,
déjame escribir una línea putrefacta,
perpleja en el sopor rancio
con el que salen tus mentiras
llenas de colores bipolares,
las vergonzosas insignias
desglosan la próxima pobre calumnia
que se abraza espantosamente
con las sombras, muere,
y crea un emblema
cargado de desgracias ajenas,
donde simplemente preferiría matarte...

24.7.08

Un pasado...


Cegando trenes.

Ojos y cueros
en las manos del desencuentro,
vaciando botellas
tejiendo sustos
y amordazando caricias,
quitándole ruidos
a las sombras de la cabeza,
que siguen haciendo
carreras de triciclos clonados
a los asesinos del tiqui-taca,
robándole pulgas
a los perros de la calle,
bebiendo leche fresca
a los pies de los paredones
de baldíos mugrosos,
no sin antes
apropiarse de las migas de pan
que el abuelo guarda
en los bolsillos,
tejiendo bufandas
con los hilos de la conciencia,
para que el invierno
de la locura
no las sorprenda desabrigadas,
aullando culpas,
asesinando madrugadas!

Nota:
Abriendo y cerrando libros sucios,
haciéndolos puerta y colectivo
también sucios,
como un juego de excusas
y abrazos descentralizando
los miedos del cariño,
las fobias de quererte demasiado!

20.7.08

Un amanecer...


Obstinado.

Destapa papeles,
mancha mesas,
un mocoso con desenfrenos viejos,
maniatando bares, camas,
pasillos interminables,
baños llenos de ganas de salir rapidito.
Un mensaje siempre guarda un pensamiento calculador,
lleno de hábitos que corren más rápido que la sorpresa,
aun divino tesoro que puede cambiarnos
de vereda rápidamente.
Desencontrarnos de ese pendejo que nos mantiene ágiles.
Nunca cambian las manos que hacen nuestro paso,
solo se cansan.
Destapar papeles solo para llenarlos
de agarradas con mi lengua,
mis retorcijones son los que manchan las mesas,
las caricaturas que soy después de perder las tapas,
por no cerrar los papeles de mi lengua disparando
un sulfuro cargado de esta,
mi ignorancia,
para poder pasar por debajo de algunos puentes...

16.7.08

Un tiempo...


Aberraciones.

Buscar hablar con la hora,
ya se sabe que el reloj no da respuestas a esta altura…
y después de todo suena lógico, ¿cierto?
Ayer un hombre estuvo por más de dos horas
mirando, contemplando a otro
que en la vereda de enfrente a el,
estaba reuniendo hojas y la suciedad que habitaba
en lo que se puede llamar el frente de su casa,
que vale destacar que es un lugar ajeno a su propiedad,
este observador se preguntaba que tipo de preguntas
no tendría aquel hombre que destinaba horas de su vida
a la ignota tarea de despejar un lugar publico que el mismo
más allá de la tarea realizada no le daría ningún uso,
sabia que no era nada de sentido común, ya que en esta ciudad
esta casi mal visto…
después de librar su imaginación, despejo de las suposiciones
a la supuesta mujer del barredor, tal vez cabía mejor la opción
de una aterrante soledad, o la falta de luz, como para la radio
una tarde de opresora y entretenida televisión, o por que no leer,
ya que una tarde cerrada y nubosa no dejaría entrar claridad en su casa de pequeñas ventanas…
Al cabo de llegar a despejar la vereda y hacer un prolijo montículo sobre la zanja, casi ya dos casa de distancia de su puerta despintada sin manijón ni timbre, este hombre se mete en su casa, luego de haber frotado la escoba fervorosamente en el árbol del vecino,
Que vale aclarar que es del estado, pero al estar frente a su entrada, este como todo ciudadano considera que no solo es su responsabilidad, sino que le pertenece, cosas de la idiosincrasia argentina…

11.7.08

Siempre escribo...


Cartas no.

Gracioso,
nunca escribo lo feliz que me pone
la noche más suave,
nunca escribo suave de todos modos.
Pero aun tengo algunas preguntas
que me dejan quieto durante horas,
sin reprimirme, pero absorto,
lleno de silencios helados,
duros como vidrios...
La verdad no sé con que palabras se escribe,
si todo esto no lo es.
Sin dudas, de todos modos,
no dejaría de garabatear entonces.
Parece no caber la desgracia de mi voz
en letras tan pequeñas
como las que he aprendido a escribir,
la sutil franqueza con la que me dejo desflorar
en un juego íntimo y exponente,
como creer que así es como escribo mis poemas,
catarquico medio de no permitir
que la locura termine de colonizarme,
y la muletilla de ponerme trágico u oscuro,
onírico y febril, para que no me queme demás la boca.
Y siempre, siempre me quedo esperando
a que se haga bien tarde,
me dejo sumergir en la somnolienta hora de la madrugada
donde los ruidos se pasean dormidos,
silenciosos, a veces, cerca de mi cuerpo
de mi propio silencio asustando lo que no puedo tocar...
condición humana a la que no tengo modo de evitarme...

7.7.08

Entre cuadros...


Siempre comida fría.

Otra vez barajar, pero no dar las cartas,
es bueno el juego donde los ojos son de otro,
yo siempre me mezclo, de eso me hago lo que soy,
y con todos esos veedores leo lo que escribo,
cuando solo me dejo en un rato sucumbir dulce,
variar entre los pliegues de algo razonable
que sabe como hacerme bajar la guardia
y siempre, siempre buscar la espalda de los espejos.
La verdad que cada vez que lo pienso, me sonrió cómplice,
son muecas que rearman una cara que se aburre
de las displicencias, que conforman
el montón de gentes que me rodea temporalmente,
tal vez, son solo mis cuentas, mis augurios y desaciertos,
pero me gusta jugar con estas sumas,
me provocan una irremediable sensación de curiosidad,
subir, bajar, estar sentado e intentar agacharse,
los seres humanos podemos hacer imposible cualquier cosa,
somos esa raza que no sabe por que, pero que participa siempre
que haya más de dos minutos, sobre todo si se puede mostrar, je.
Y por cierto, me falta una carta, oiga, me falta una carta!
Es tan normal querer jugar en cualquier condición,
siempre y cuando el humano sienta chances de victoria, que triste.
No es que lo mío sea la aventura de competir, el deporte, no,
juego por que no llevo mas que perder, es una buena aventura,
y sinceramente, en la última partida perdí el miedo,
y había creído que ya no me prestaría a nada de esto,
y aquí me ven, desafiando la nada,
a ver si consigo un poco mas de ella…

3.7.08

Un silencio tambien...


Suma huesos.

Un día de felicidad
que te cueste la vida,
otro que pague,
una sorpresa a desenvolverse
policromatica, atemporal, inexorable
y alguien diría juego,
yo por lo menos, je!
Dale la vuelta a la tortilla
antes que se queme la cocina,
que se abra la sartén al medio,
sino me caigo, me pierdo
en una mecedora de alambres de púa,
en la cama de clavos sin limpiar,
al lado de mi conciencia,
bajo tu manto de sombra
en los pliegues de tu sombrero,
en los trabajos bajo tu pollera
sin las manos limpias,
en los ojos de vidrio, je!
Y en una de esas
es solo una atemporalidad,
una cama y otra y otra,
una sucesión de ardores infernales,
de sueños sin asesinos,
de juguetes pródigos
de sudor, de sangre,
así se ha de callar mi silencio!

Nota:
Mal callado, entre abierto en un sueño,
en la boca de los ojos,
en los oídos apretados
de contarse los dedos hasta que falte uno, je!
Hasta que la cuenta no sume,
no rompa vidrios, ni sales de emergencia!